El lenguaje del turismo con mascotas

Comunicación, vocabulario y mensajes

El turismo, siendo uno de los sectores más dinámicos y en constante evolución, ha observado un crecimiento en la tendencia de viajar con mascotas, en particular con perros. La inclusividad y personalización se han convertido en dos pilares fundamentales de la industria.

Como respuesta a esto, consideramos que es muy importante para las empresas turísticas entender y conectar con este segmento específico de viajeros de una manera que sea auténtica y eficaz. El propósito principal de este estudio es, por lo tanto, desentrañar las preferencias lingüísticas y semánticas de los viajeros con perro cuando buscan y consumen servicios turísticos. Con toda esta información queremos proporcionar a las empresas turísticas una hoja de ruta clara sobre cómo comunicarse de manera efectiva y genuina con los viajeros que no se separan de sus fieles compañeros de cuatro patas.

Para lograr una comprensión profunda y matizada de las preferencias de los viajeros con perros, optamos por una metodología de encuesta estructurada en distintas secciones, en las que se aborda en cada una un aspecto diferente del viaje y se centra en desentrañar la terminología y mensajes que resuenan más con este segmento de viajeros. Las preguntas se diseñaron para ser claras y directas, permitiendo tanto respuestas cerradas como abiertas. Las respuestas cerradas nos proporcionaron datos cuantitativos que pudieron ser analizados estadísticamente, mientras que las respuestas abiertas arrojaron luz sobre las particularidades y matices de las preferencias individuales.

Adicionalmente a la encuesta, en la que participaron 492 viajeros perrunos, consideramos importante profundizar en conocer algunos matices directamente de los viajeros con perro para mejorar la experiencia turística. Para ello organizamos 4 sesiones de trabajo con diversos grupos de tutores de mascotas que nos ayudaron a terminar de comprender las sensibilidades y preferencias en el lenguaje y comunicación en el sector turístico relacionado con viajar con perro u otras mascotas.

Algunos aprendizajes de la encuesta

¿Cómo prefieres que se refieran a ti los servicios turísticos en relación con tu mascota?

La variedad de respuestas indica una amplia gama de cómo las personas se identifican en relación con sus mascotas, desde una preferencia por no tener una etiqueta específica hasta identificarse estrechamente con roles familiares o de cuidado. Esto resalta la diversidad en la percepción de la relación humano-mascota.

Las respuestas a la encuesta sobre cómo los individuos prefieren ser referidos en relación con sus mascotas por los servicios turísticos pueden agruparse en las categorías que se exponen a continuación.

 

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Sin preferencia específica

Un segmento notable (25,2%) no muestra preferencia por un término específico, indicando flexibilidad o neutralidad ante la terminología utilizada.

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Términos informales o igualitarios

Un 20,5% prefiere una referencia informal como “compañero/a de (nombre de la mascota)”, mostrando una inclinación hacia un trato más igualitario y amistoso.

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Términos de responsabilidad

“Tutor/a”(7,5%) y variaciones en “Otro” como “su responsable” o “su humano” reflejan una preferencia por términos que indican cuidado y responsabilidad, evitando implicaciones de propiedad. Estos términos son vistos como una manera de reconocer la dignidad de las mascotas sin reducir la relación a una de propiedad.

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Términos de propiedad con reservas

Aunque “Dueño/a” fue elegido por el 21,5% y “Propietario/a” por el 6,9%, hay un reconocimiento de que términos como estos, así como “amo”, pueden generar rechazo. Estos términos son tradicionalmente utilizados, pero cada vez más personas los ven como inadecuados por implicar que las mascotas son propiedad más que seres vivos con derechos y sentimientos.

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Términos familiares con doble perspectiva

“Padre/madre de mascota” (16,3%) representa una visión que humaniza la relación con las mascotas, tratándolas como miembros de la familia. Sin embargo, es importante notar que este término también tiene detractores significativos que lo ven como una excesiva humanización que no respeta la naturaleza animal y autónoma de las mascotas.

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Preferencias diversas y específicas

La categoría “Otro” (3,9%) incluye una variedad de términos que buscan equilibrar el respeto por la autonomía de la mascota con el reconocimiento del compromiso y la responsabilidad del humano. Términos como “Guía” sugieren una relación de acompañamiento y cuidado sin asumir propiedad.

Estas categorías reflejan un espectro de preferencias que buscan equilibrar la dignidad y autonomía de las mascotas con el reconocimiento de la
responsabilidad y el cuidado de los humanos hacia ellas. Mientras algunos se inclinan por términos que reflejan cuidado y responsabilidad, otros
rechazan la humanización excesiva o la noción de propiedad en favor de una relación más basada en el respeto mutuo y el compañerismo.

¿Cómo prefieres que los negocios turísticos se refieran a tu mascota en su comunicación?

La preferencia dominante por ser referidos “Por su nombre” indica una tendencia hacia la personalización y el reconocimiento individual de las mascotas. Esto sugiere que las personas ven a sus mascotas como individuos con identidad propia, más que como una categoría genérica. Las variadas respuestas muestran la gama de relaciones emocionales y descripciones que las personas tienen para con sus compañeros de cuatro patas.

Las respuestas a la encuesta pueden agruparse en varias categorías basadas en el tono y la especificidad.

 

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Identificación personalizada

Por su nombre (33,7%): Refleja el deseo de un reconocimiento individual y personal, considerando a la mascota como un miembro de la familia con su propia identidad única.

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Términos genéricos

  • Mascota (16,9%): Aceptación de un término común y ampliamente utilizado para referirse a los animales domésticos, aunque menos  personal que el nombre propio.
  • Animal de compañía (7,7%): Un término que denota compañerismo pero que aún se siente genérico, utilizado por aquellos que buscan una descripción respetuosa y formal.
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Apodos afectuosos o descriptivos

  • Peludo/a (14,4%): Un término cariñoso que se refiere a la textura del animal, comúnmente utilizado en un tono afectivo y familiar.
  • Compañero/a de cuatro patas (13,2%): Otro apodo afectuoso que resalta la naturaleza animal de la mascota mientras implica una relación cercana.
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Términos específicos y descriptivos

Específicamente por su especie (perro, gato, etc.) (13%): Preferencia por términos que son precisos y descriptivos, identificando a la mascota por su especie en lugar de un término más general o un apodo.

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Preferencias diversas y específicas

Otro (1%): Incluye una variedad de respuestas más específicas o alternativas, desde términos únicos como “Perrihijo” hasta expresiones de no tener preferencia mientras el término se use con respeto. Esta categoría refleja la variedad de relaciones y formas de identificación que las personas tienen con sus mascotas.

Estas categorías reflejan una gama desde preferencias por un reconocimiento muy personalizado y específico hasta términos más genéricos o descriptivos. La elección depende del nivel de personalización y afecto que cada persona desea reflejar en la comunicación sobre su mascota, así como el respeto y el tono que esperan de los servicios turísticos.

El análisis sugiere que, para atraer y satisfacer a los viajeros con mascotas, los profesionales del sector turístico deben enfocarse en la personalización y el uso de un lenguaje que refleje el vínculo emocional entre los humanos y sus mascotas. Reconocer a las mascotas por su nombre y utilizar términos que connoten familiaridad y cuidado puede mejorar significativamente la experiencia del cliente y potenciar la lealtad.

Comunicación empática y efectiva 

La terminología y el tono en la comunicación son esenciales. Utilizar términos como “tutores” y “compañeros de cuatro patas” no solo refleja respeto y cariño hacia los animales, sino que también promueve una visión más integradora y familiar. La idea es transmitir un mensaje que reconozca a las mascotas como miembros valiosos de la familia y no solo como acompañantes.

Semáforo del vocabulario: ¡Habla perruno con estilo!

Palabras que conectan con tu público

“Tutor”, “Humano”, “Compañero”
¡Porque no somos dueños, sino compañeros de vida!

“Nombre propio“ o apelativo cariñoso
¡Porque cada peludo es único!

Términos neutrales pero aceptables

“Responsable”, “Guía”
Términos que implican cuidado y
atención, evitando la connotación de propiedad.

“Mascota”, “Perro”, “Gato”
Genérico, pero seguro.

Palabras para dejar en la caseta

 

“Propietario”, “Amo”, “Dueño”
¡No! Nuestros amigos no son objetos.

“Bicho”, “Animal“, “No racional”
Demasiado frío, ¡nuestros peludos son familia!

Principales aprendizajes: del ladrido a la palabra

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La era del vocabulario inclusivo

Los viajeros con perros prefieren términos que reflejen empatía y compañerismo. El término “tutor” gana pataletas de aprobación.

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Personalización es la clave

Llamar a los perros por su nombre propio no solo es un signo de respeto sino de conexión emocional.

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Alojamientos ‘Dog-Friendly’: ¿Más que una etiqueta?

Claridad en políticas de admisión de mascotas. “Dog-friendly” debe ser un compromiso, no solo un eslogan.

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Actividades perrunas: más que un paseo por el parque

Experiencias inclusivas y seguras que se adaptan a todas las patas.

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Comunicación que Guau!

Mensajes que resuenan: “Aquí toda tu familia es bienvenida”, incluyendo a los amigos de cuatro patas.

Conclusiones y recomendaciones

¿Cómo mejorar el mundo para los viajeros con perros?

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Adiós a los términos antiguos

Evitemos palabras que insinúen propiedad. Los perros son mucho más que bienes; son compañeros de vida.

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Más que palabras

Gestos como ofrecer agua o snacks para perros demuestran una
verdadera bienvenida.

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Coherencia en el servicio

Si un lugar se anuncia como “dog-friendly”, que realmente ofrezca
lo que promete. ¡No más sorpresas desagradables!

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Transparencia total

¡No solo es cuestión de comunicarlo! Las políticas sobre mascotas deben ser claras desde el principio.¡Los viajeros y sus perros lo agradecerán!

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Un lenguaje que acaricia las orejas

Adoptemos un lenguaje que refleje la naturaleza emocional y familiar de la relación con las mascotas.

Este estudio es un paso gigante hacia un turismo más inclusivo y respetuoso con los peludos. Los datos no mienten: los viajeros con perros desean ser entendidos, respetados y acogidos, al igual que sus fieles compañeros.

¡Es hora de que el sector turístico ajuste su lenguaje y servicios a esta tendencia creciente!

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